Investigadores de la Universidad del Centro Educativo Latinoamericano y de la Universidad Nacional del Litoral, ambos de Argentina, obtuvieron bioetanol a partir de desechos de zanahoria. Los científicos involucrados desarrollaron un método para aprovechar los hidratos de carbono, que en forma de azúcares son parte de la composición de la zanahoria, y que puede ser fermentables, es decir, ser convertido en alcohol.

La iniciativa surgió con la necesidad de encontrar un uso útil al 30% de la producción de este producto en el Distrito de la Costa, cerca de la ciudad de Santa Fe, que era descartada por no cumplir las condiciones necesarias para salir al mercado. Esta situación generaba además un importante foco de contaminación del suelo. Los investigadores lograron extraer los azúcares de las zanahorias, mejoraron la metodología para hacerlo y posteriormente, se probaron distintas levaduras como catalizadores de reacción de la fermentación. Al final, lograron obtener cerca de 80 litros de bioetanol por cada tonelada de estos descartes de zanahorias.

El bioetanol es etanol o alcohol etílico obtenido por fermentación etílica, es decir que, luego de ser purificado, no posee diferencias respecto del etanol obtenido por métodos químicos. Las perspectivas de mercado son halagüeñas. Además de utilizarse como biocombustible, “también se emplea como aditivo para combustibles, antiséptico, solvente e ingrediente de bebidas o alimentos”. Los resultados de este trabajo fueron publicados recientemente en la revista “Bioresource Technology”.

Fuente: CyTA
Publicación original de la UCEL:  Aimaretti_OBTENCION_DE_BIOETANOL_DE_SEGUNDA.pdf