• Designación hecha por la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE).

 

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“¿Pueden pensar las máquinas?”

Alan Turing

El 29 de diciembre de 2022, la Fundación del Español Urgente (FundéuRAE) anunció que había seleccionado “inteligencia artificial” como la palabra del año 2022 —aunque en realidad son dos palabras—.

El escrutinio se hizo entre 12 palabras candidatas: apocalipsis, criptomoneda, diversidad, ecocidio, gasoducto, gigafactoría, gripalizar, inflación, inteligencia artificial, sexodopaje, topar y ucraniano.

La FundéuRAE eligió el concepto “inteligencia artificial” con base en la relevancia que tuvo esta innovación tecnológica en los diferentes medios de comunicación, lo cual se reflejó en las veces que fue mencionada durante 2022. Inteligencia artificial es definida como la disciplina científica que se ocupa de crear programas informáticos que ejecutan operaciones comparables a las que realiza la mente humana, como el aprendizaje o el razonamiento lógico.

La Fundación expresó lo siguiente con respecto a su decisión: “El análisis de datos, la ciberseguridad, las finanzas o la lingüística son algunas de las áreas que se benefician de la inteligencia artificial. Este concepto ha pasado de ser una tecnología reservada a los especialistas a acompañar a la ciudadanía en su vida cotidiana: en forma de asistente virtual (como los que incorporan los teléfonos inteligentes), de aplicaciones que pueden crear ilustraciones a partir de otras previas o de chats que son capaces de mantener una conversación casi al mismo nivel que una persona.”

El término inteligencia artificial fue utilizado por primera vez en 1956 por el matemático John McCarthy durante una conferencia que dio en la Universidad de Dartmouth, y en donde planteó: «Este estudio procederá sobre la base de la conjetura de que todos los aspectos del aprendizaje o cualquier otro rasgo de la inteligencia pueden, en principio, ser descritos de una forma tan precisa que se puede crear una máquina que los simule».

Seis años antes, el artículo que escribió Alan Turing “Computing Machinery and Intelligence” y el consiguiente “Test de Turing” habían sentado las bases de la inteligencia artificial, su visión y objetivos.

¿Cómo se escribe?

Desde el punto de vista de la lingüística, esta construcción es una “denominación común y, por lo tanto, lo adecuado es escribirla sólo con minúsculas. Es también habitual el empleo de la sigla IA, que se escribe con mayúsculas, y que es preferible a la inglesa AI (artificial intelligence)”.

 

Leticia Monroy Valentino