Texto por Paulina Arroyo Gerala

Cuando tomé esta fotografía  en el estado de San Luis Potosí no me percaté de que eran dos individuos. Se trata de una hembra y un macho de la especie Ecnomiohyla miotympanum, conocidas como ranitas arborícolas de orejas chicas, que se encuentran en amplexus o abrazo nupcial. Esto es un modo de acoplamiento característico de las ranas con fecundación externa, es decir, la hembra deposita los huevos en un lugar adecuado,  como a la orilla de un estanque, y posteriormente los machos ponen sus espermatozoides. Durante el abrazo nupcial, el macho se aferra a la espalda de la hembra para garantizar que cuando la hembra deposite los huevos estos sean fecundados. En general, en las ranas existe una clara diferencia de tamaño entre los sexos. Como se observa en la fotografía, las hembras tienden a ser más grandes que los machos. Esta diferencia generalmente se debe a que hembras más grandes pueden cargar más huevos y por lo tanto producir más crías, mientras que los machos solo cargan los pequeños espermatozoides.  Por otro lado, esto me hace pensar que esto sería un alivio para las hembras cuando tienen que cargar a los machos durante este abrazo nupcial.

Las ranitas arborícolas de orejas chicas son endémicas de México y viven a lo largo de la Sierra Madre Oriental, principalmente en los bosques mesófilos de montaña (o bosques nublados), uno de los ecosistemas con mayor diversidad en nuestro país. La especie es abundante, sin embargo, el ecosistema que habita es uno de los más amenazados. Los bosques mesófilos de montaña ocupan una porción muy pequeña de nuestro territorio y están bajo constante amenaza por el cambio de uso de suelo y la deforestación. De acuerdo a la lista roja de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN http://www.iucn.org/es/) se encuentra catalogada como casi amenazada y sus poblaciones siguen disminuyendo. Los anfibios son los vertebrados más amenazados en el mundo debido a que son muy sensibles a los cambios ambientales y la contaminación. Con disminución de las poblaciones de esta especie, observarlos en su hábitat natural y poder capturar una de estas imágenes será cada vez más difícil. La protección de sus hábitat permitirá que este abrazo se repita una y otra vez , asegurando la perpetuidad de éstas ranitas arborícolas  de orejas chicas y de la gran diversidad de anfibios que existen en nuestro planeta.

La diferencia de tamaño entre sexos de la ranita arborícola de orejas chicas es notoria cuando el macho se coloca sobre la hembra. Foto por Paulina Arroyo Gerala

La diferencia de tamaño entre sexos de la rana arborícola de orejas chicas es notoria cuando el macho se coloca sobre la hembra. Foto por Paulina Arroyo Gerala