La Real Academia de Ciencias de Suecia anunció este martes 8 de noviembre que los ganadores del Premio Nobel de Física 2019 son: James Peebles por sus descubrimientos teóricos en cosmología física, Michel Mayor y Didier Queloz por el descubrimiento de un exoplaneta orbitando una estrella similar al Sol. El primero fue distinguido con la mitad del premio mientras los dos segundos recibieron de manera conjunta la otra mitad del galardón.

Al hacer el anuncio, Göran K. Hansson, secretario general de la Real Academia de Suecia, señaló que este año se premiaron contribuciones a la comprensión de la evolución del universo y el lugar de la Tierra en el cosmos; conocimientos que han cambiado para siempre la concepción que tenemos del mundo.

Mats Larsson, presidente del Comité del Premio Nobel de Física, dijo que la radiación cósmica de fondo descubierta en 1965 resultó ser una mina de oro para entender de qué manera el universo se desarrolló desde su tierna infancia hasta el presente. Estos avances hubieran sido imposibles sin los descubrimientos de James Peebles y sin las precisas mediciones de la radiación cósmica de fondo llevadas a cabo durante las dos pasadas décadas.

James Peebles desarrolló herramientas teóricas y las usó para descubrir los componentes oscuros del universo.
Crédito:Johan Jarnestad /Real Academia de Ciencias de Suecia.

Por otro lado, dijo, en octubre de 1995 Michel Mayor y Didier Queloz descubrieron un planeta fuera del sistema solar orbitando una estrella semejante al Sol, una revelación que cambió para siempre la forma como concebimos el lugar de la Tierra en el Universo. Desde entonces se han descubierto más de 4 mil exoplanetas. Recientemente, se ha encontrado que algunos de estos tienen el potencial de albergar vida.

Tiempo atrás en la década de los 60, James Peebles se dio cuenta de la importancia de la radiación cósmica de fondo y a lo largo de las siguientes dos décadas desarrolló herramientas teóricas y las usó para descubrir los componentes oscuros del universo. Gracias a su trabajo, la cosmología evolucionó a una ciencia de precisión basada en cimientos matemáticos y a ser una cosmología física.

Los resultados de su trabajo nos muestran un universo en el cual solo 5 por ciento de su contenido es conocido, la materia que constituye estrellas, planetas, árboles, y los seres vivos. El restante 95 por ciento es conocido como materia oscura y energía oscura elementos que constituyen  un gran desafío para la física moderna.

Michel Mayor y Didier Queloz anunciaron en octubre de 1995, el descubrimiento de un planeta que orbitaba una estrella similar al Sol en el interior de nuestra galaxia, La Vía Láctea. Trabajando en el Observatorio de la Alta Provenza en el sur de Francia y usando instrumentos hechos a la medida, fueron capaces de detectar al planeta 51 Pegaso b, una bola de gas comparable con el planeta gigante de nuestro sistema solar, Júpiter. Este giraba alrededor de una estrella, a 50 años luz de nosotros, que puede verse a simple vista en una noche oscura en la constelación de Pegaso.

En 1995 Michel Mayor y Didier Queloz descubrieron por primera vez un planeta fuera del sistema solar orbitando una estrella similar al Sol, la estrella 51 Pegaso.
Crédito:Johan Jarnestad /Real Academia de Ciencias de Suecia.

Ellos no podían ver al planeta directamente por lo que desarrollaron otros métodos. Cuando un planeta está orbitando una estrella, la estrella muestra un cambio sutil en su color y eso es lo que ellos midieron para poder detectarlo. En el tiempo de su descubrimiento, pocos científicos pensaban que esos planetas pudieran existir. Se pensaba que otros sistemas solares serían similares al nuestro pero esa idea era incorrecta. Gracias a su descubrimiento ahora se sabe que hay muchos tipos de sistemas planetarios y que en tan solo en nuestra galaxia podría haber billones de planetas algunos similares a nuestra Tierra.

Su descubrimiento inició una revolución en la astronomía forzando a los científicos a revisar sus ideas acerca de los procesos físicos que hay detrás del origen de los planetas. Además, se estima que con los numerosos proyectos actuales que hay para la búsqueda de exoplanetas eventualmente se podría encontrar la respuesta a la eterna pregunta de si hay vida en otros lugares del universo.

Fuente: The Nobel Prize

Redacción:  Naix’ieli Castillo, Ciencia UNAM.