Combinando fotografías obtenidas en los años sesenta por un satélite espía con modernas imágenes multiespectrales y mapas digitales de la superficie terrestre, el ingeniero Bjoern Menze, del MIT, y el antropólogo Jason Ur, de la Universidad de Harvard, crearon un nuevo método computarizado de detección de asentamientos antiguos, que aplicaron en el territorio de la antigua Mesopotamia (al norte de la actual Siria), en un territorio de 23.000 kilómetros cuadrados.

El trabajo consistió “en detectar los llamados “anthrosoles”, suelos formados a raíz de la actividad humana, que se distinguen por el color y por un elevado contenido de sustancias orgánicas. Los datos obtenidos fueron procesados mediante un programa digital elaborado por Menze. Utilizaron también un mapa de elevaciones creado en el marco del programa ‘Shuttle Radar Topography Mission’ a partir de los datos de radar proporcionados por el transbordador Endeavour en el 2000. Las elevaciones del terreno a menudo son vestigios de antiguas edificaciones. El mapa elaborado como resultado de ese trabajo, contiene unos 14 mil supuestos asentamientos antiguos.

El trabajo fue publicado en la revista “Proceedings” de la Academia Nacional de Ciencias de Estados Unidos el 19 de marzo y retomado el mismo día por el portal de Nature.

Publicación del PNAS:  1115472109.abstract?sid=f16c769d-da13-404f-8985-0308a817362f
Fuente Nature: satellites-expose-8-000-years-of-civilization-1.10257