Científicos del laboratorio de Paleoneurobiología del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana –CENIEH- de España, acaban de publicar tres trabajos sobre tres fósiles que abarcan los tres continentes originarios de distribución del género Homo: África, Asia y Europa. Se trata de los estudios paleoneurológicos del cráneo de Buia, un Homo erectus hallado en Eritrea y del cráneo de Maba, hallado en China, y del estudio anatómico sobre el parietal de Homo antecessor, hallado en España. Lo interesante de estos trabajos es que apuntarían a una evolución diferenciada del género Homo en Eurasia.

José María Bermúdez de Castro (codirector del yacimiento de Atapuerca) y Emiliano Bruner (paleoneurólogo del CENIEH) muestran varios fósiles del género Homo. CENIEH

José María Bermúdez de Castro (codirector del yacimiento de Atapuerca) y Emiliano Bruner (paleoneurólogo del CENIEH) muestran varios fósiles del género Homo. CENIEH

Tres fósiles, tres evoluciones

El estudio del molde endocraneal de Buia, un homínido africano datado en un millón de años, descubierto al sur de Eritrea, apunta a una forma cerebral con rasgos generalmente primitivos, pero a la vez muy distinto de otros hallazgos asociados a la misma especie. Estas diferencias denotan una variabilidad muy acentuada en estos primeros humanos.

En lo que atañe al continente asiático, el estudio paleoneurológico del cráneo de Maba, encontrado en la provincia china de Guandong en los años 1950, datado entre los 300.000 y los 130.000 años, presenta rasgos muy afines a los neandertales pero, según revela el estudio, una forma cerebral más antigua y menos especializada, como en Homo erectus o en Homo heidelbergensis. Según los especialistas del CENIEH, este fósil chino podría estar relacionado con unos pobladores de Siberia aún por identificar, dado que hay estudios genéticos que han sugerido la existencia de grupos humanos extintos en estas regiones, diferente de los otros ya conocidos en Europa y Asia.

Reconstrucciones digitales publicadas en los estudios paleoneurológicos de los fósiles de Maba (China), Gran Dolina (España) y Buia (Eritrea)(E. Bruner)/EFE

Reconstrucciones digitales publicadas en los estudios paleoneurológicos de los fósiles de Maba (China), Gran Dolina (España) y Buia (Eritrea)(E. Bruner)/EFE

Y finalmente, el trabajo sobre el fósil hallado en Europa, en la Sierra de Atapuerca, España, estudio anatómico del fragmento más grande hasta ahora conocido del neurocráneo de Homo antecessor, el parietal descubierto en el yacimiento de Gran Dolina de Atapuerca (Burgos), y datado en alrededor de 800.000 años. Dicho estudio anatómico revela caracteres primitivos comunes a Homo erectus y a otros homínidos arcaicos, una edad juvenil, y fracturas posiblemente asociadas a la muerte del individuo.

Nuevas pistas para la investigación

En una entrevista concedida a la agencia EFE, el coordinador del estudio, José María Bermúdez de Castro, ha considerado que las conclusiones confirman que el fósil encontrado en Europa no era una especie de origen directamente africano, como el propio equipo de Atapuerca había señalado en 1997, sino que es una especie “europea o euroasiática”. En este sentido, el científico comentó que esto venía a evidenciar que la historia de Eurasia es “mucho más compleja de lo que se pensaba”. Antes de agregar que “parece que las poblaciones asiáticas y europeas compartieron un ancestro común procedente de África y eso explica que tengan características similares, aunque no idénticas”. Se requerirá de nuevos estudios para seguir las distintas pistas de la evolución.

Fuente: CENIEH

Boletín original:http://www.cenieh.es/es/sala-de-prensa/noticias/actualidad/el-cenieh-publica-los-estudios-de-tres-fosiles-de-hominidos-encon