Investigadoras de la Facultad de Ciencias Sociales, Jurídicas y de la Comunicación de la Universidad de Valladolid en el Campus de Segovia han llevado a cabo una encuesta entre estudiantes de Educación Secundaria de Segovia en la que se ha puesto de manifiesto que tres de cada cuatro ha sufrido algún tipo de experiencia negativa en redes sociales, aunque estos episodios no influyen en su valoración del riesgo.

El fenómeno de las redes sociales

El acceso a internet y a las redes sociales por parte de los menores es un fenómeno generalizado que ha recibido bastante atención por parte de la investigación aplicada y la comunidad educativa. El 93,6% de los niños entre 10 y 15 años utiliza internet y el 90,9% dispone de teléfono móvil; y a partir de los 16 años el 98,3% accede a internet y posee móvil (INE, 2016). El acceso a las redes y plataformas sociales es una de las actividades que más tiempo ocupan en la esfera interactiva. En España el 87,2% de los usuarios de internet tiene un perfil activo en las redes sociales, y el 62,0% de los internautas consultó las redes sociales en el mes de marzo de 2016. Los estudios específicos realizados con adolescentes dan cuenta del alcance que toma el fenómeno de las redes sociales.

Oportunidades y preocupaciones

La rápida incorporación de internet y las redes sociales por parte de chicos y chicas puede ser una fuente de oportunidades para ellos, al tiempo que genera desconfianza y preocupación entre padres, educadores y la sociedad en general. El uso excesivo de internet, el contacto con personas desconocidas, el acoso que puede recibirse o el acceso a contenidos violentos, racistas o sexuales son riesgos a los que se enfrenta este público vulnerable.

La muestra

Profesora Belinda De Frutos Torres

El estudio se llevó a cabo con una muestra de 370 participantes seleccionados en centros de educación secundaria ubicados en Segovia, España. Se seleccionaron al azar dos centros públicos y dos centros privados-concertados y se eligieron alumnos de tercer y cuarto curso de Educación Secundaria Obligatoria. El rango de edad se situaba entre los 14 y 18 años, con una media de 15,3 años.

Algunos resultados

El 4,3% de los participantes indicó que no tenía cuenta abierta en ninguna red social. El 49,2% tiene entre dos y tres cuentas, otro 20,3% declara 4 cuentas activas y el 18,9% está suscrito a 5 ó más cuentas. La mitad se conecta en 3 de los períodos (media = 2,89 y deviación típica 1,59) que equivale aproximadamente a unas 9 horas al día.

El 66,1% afirma tener su perfil privado para que sólo puedan verlo sus amigos, ésta se considera una práctica segura. El resto declara prácticas más arriesgadas, en concreto, un 17,5% tiene parcialmente privado su perfil (pueden verlo amigos de amigos) y un 16,4% de los casos está abierto a cualquier persona.

Pese a que la mayoría de adolescentes ha tenido malas experiencias en las redes sociales, no percibe su riesgo / Fotografía: DICYT

En la experiencia diaria de las redes sociales los jóvenes se enfrentan con situaciones desagradables. Aunque la frecuencia con la que se relatan este tipo de hechos fluctúa entre el 17,8% y el 34,7%, son acciones que se dan simultánea y repetidamente. Sólo uno de cada cuatro participantes declara que no ha tenido ninguna experiencia negativa en su uso de las redes sociales.

Primeras conclusiones

La principal conclusión es la disociación entre la percepción del riesgo y las experiencias en las redes sociales. Cabría esperar que las experiencias negativas fueran un estímulo para que los menores sean más conscientes de los riesgos a los que pueden estar expuestos en las redes sociales. Sin embargo los resultados muestran que no hay relación entre ambos aspectos. Del mismo modo, las experiencias positivas derivadas de las redes sociales no se traducen en una disminución del riesgo percibido. Tan sólo el género ha mostrado tener un papel significativo en la percepción de riesgo de las redes sociales que es mayor en las chicas adolescentes. Este resultado explica la dificultad para concienciar sobre los riesgos si ni siquiera la propia experiencia sirve de referencia para tomar conciencia de las situaciones difíciles a las que les pueden llevar las redes sociales.

Fuentes: Universidad de Valladolid y Agencia Sinc

Boletín original: https://recyt.fecyt.es/index.php/EPI/article/view/epi.2017.ene.09