Las personas que tienen deficiencias neurológicas para comunicarse podrían beneficiarse enormemente del desarrollo de tecnología que permita convertir la actividad neuronal en palabras.
Además de atribuírsele eventos extremos y devastadores efectos en la ecología, la salud humana y la agricultura, el cambio climático podría jugar un papel en la cada vez más importante brecha entre los países ricos y pobres del planeta.